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El Big Data contra el fraude fiscal

¿Pueden las nuevas tecnologías ayudar a perseguir los fraudes tributarios? 

Este año empezaba con la aprobación del nuevo Plan Anual de Control Tributario y Aduanero de 2021, que llegó en pleno debate sobre el éxodo de creadores de contenido digital españoles a Andorra que, desde 2016, cada vez es más frecuente.  

El hecho de que los contribuyentes con patrimonios elevados decidan cambiar de residencia, reclama establecer nuevas medidas de análisis fiscal que permitan determinar el verdadero domicilio fiscal de esa persona y, por tanto, descartar un posible fraude contra la Hacienda Pública 

Es por ello, que el 1 de febrero de 2021 la Agencia Tributaria española anunciaba la implantación de un sistema de análisis basado en Big Data para la detección de diversos tipos de fraude fiscal, lo que supone una novedad y un nuevo impulso para la comprobación tributaria de este perfil de contribuyente. 

El uso del Big Data permite realizar un análisis masivo de datos cruzando varias fuentes de información, lo que facilita la investigación para detectar falsos residentes, es decir, para encontrar contribuyentes que dicen vivir fuera de España, con el objetivo de despistar a Hacienda y, de esta forma, eludir sus obligaciones fiscales. 

Pero ¿Cuáles son los criterios que determinan si una persona reside en España? En primer lugar, debe permanecer más de 183 días, durante un año natural, en territorio español. También, será un factor determinante que la base de sus actividades económicas se encuentre en España, de forma directa o indirecta. Y, finalmente, que residan, de forma habitual, en España el cónyuge e hijos menores de edad. Cuando un contribuyente cumpla estos supuestos, deberá tributar en España.  

Así pues, según los datos publicados en el informe de control tributario de 2020 por el Ministerio de Hacienda confirman que, en relación con los contribuyentes que disponen de grandes patrimonios se han recaudado deudas por un importe de 437 millones de euros. Lo que supone un incremento del 25% respecto de 2018. Estos datos demuestran como el uso de las nuevas tecnologías, en este caso del Big Data, son muy útiles y contribuyen a reforzar el sistema tributario para evitar posibles casos de fraude