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Apertura de negocio: ¿constituir una empresa o franquiciarse?

Constituir una empresa o franquiciarse son dos de las opciones más recurrentes a la hora de plantearse una apertura de negocio. Otras vías serían las fusiones o adquisiciones. Pero, ¿cuáles son las ventajas de una y otra opción? ¿Qué detalles jurídicos se deben mantener en mente a la hora de establecerse?

Las opciones de apertura de negocio

A la hora de abrir un nuevo negocio disponemos de varias soluciones legales. Sin embargo, podemos clasificarlas en dos grandes grupos:

  1. La creación de una nueva compañía. En este caso hablamos de un negocio nuevo, que parte de cero. Puede basarse en un plan de negocio más o menos estable y previsor, o bien en la exploración de modelos de negocio como ocurre con las startups. Ambas modalidades tienen algo en común: el plan o modelo de negocio será original y la base del posterior desarrollo de la empresa.
  2. La continuación de la actividad de una compañía previa. En este caso hablamos de aprovechar recursos de otra compañía. Podemos estar ante un traspaso o adquisición, donde obtenemos una cartera de clientes y un negocio en funcionamiento, o bien de una franquicia, donde aprovechamos un modelo de negocio contrastado, elementos de propiedad intelectual y un know how. En todo caso estamos hablando de desarrollar el negocio sobre unas vías preestablecidas.

Ventajas y desventajas de constituir una empresa

La principal ventaja de constituir una empresa radica en que poseemos el control absoluto sobre el desarrollo de la organización desde el primer momento. A cambio, tendremos que hacer frente a un mayor grado de incertidumbre.

Sobre la constitución de empresas ya hablamos en otro artículo del blog. Allí reunimos los trámites y requisitos esenciales, por lo que remitimos al lector para poder hacerse una idea de las cautelas legales que tendrá esta forma de apertura de negocio.

En cualquier caso, debemos recomendar que la constitución de una empresa se gestione con el apoyo legal de un especialista en la materia. Los abogados especializados en derecho societario podemos ayudar a regular todos los aspectos laborales, mercantiles y fiscales que requiere este tipo de operaciones.

Ventajas y desventajas de franquiciarse

La principal ventaja de una franquicia es que la empresa se basa en un modelo de negocio conocido y contrastado. Además, puede apoyarse tanto en la propiedad intelectual como en el know how del franquiciador. Esto permite al franquiciado reducir la incertidumbre en los momentos iniciales de su negocio, incrementando sus posibilidades de éxito.

A cambio, franquiciarse tiene unos costes en forma de canon de entrada y regalías periódicas. Estas suelen abonarse mensualmente y pueden alcanzar hasta el 5% de la facturación del negocio.

Franquiciarse también supone limitaciones a la capacidad de innovación de la empresa. Además, puede imponer ciertos obstáculos a la actividad posterior del empresario, que tratan de limitar la competencia y proteger el know how de la matriz.

¿Cuál es la mejor opción a la hora de abrir un negocio?

Como ocurre en otras áreas del derecho, esto dependerá de muchos factores. Principalmente, de las condiciones del contrato de franquicia, que por su importancia se debe estudiar, junto al manual del franquiciado, con la asistencia de un abogado especializado en el sector.

Pero también de la complejidad jurídica del negocio, la viabilidad del plan de empresa, la disponibilidad de liquidez… En definitiva, en cada caso se deberá realizar un estudio de detalle que, como indicamos, conviene hacer con la ayuda de especialistas. Si está pensando en la apertura de un negocio y no se decide entre constituir una empresa o franquiciarse, contacte con OBN&.